La filosofía no puede quedarse atrapada en los libros ni encerrada en su torre de marfil. La necesitamos cerca de nosotros, ayudándonos a pensar en esos temas que nos acechan detrás de cada conversación o de algunas lecturas y que nosotros dejamos partir, porque no tenemos ni tiempo para reflexionar sobre ellos ni las herramientas para resolverlos. La necesitamos porque pensar la vida desde una postura filosófica es desarrollar la capacidad crítica y el juicio, es luchar por la coherencia y descubrir las contradicciones de nuestro propio pensamiento. La filosofía cotidiana es, antes que nada, la posibilidad de hacer una crítica al sentido común en sus aplicaciones más usuales, partiendo del legado que nos han dejado los grandes (y los pequeños) filósofos.
http://www.filosofiacotidiana.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario